Ante sus palabras envalentonadas me sentí inspirado, y ese destellante sonrojo que se empecinaba en seguir apareciendo en su rostro centrándose en sus mejillas colaboraba mucho más con tal inspiración.
Eren, no tienes ni idea de lo que pienso hacer si te gano.
Eran mis pensamientos mientras le vi tan determinado a ganarme. Definitivamente algo me decía que tendría mucha suerte hoy.
- Te recomiendo cerrar la ventana. - Dije con sarcásmo evidente mientras daba comienzo la partida. Era cierto que Eren sabía jugar, pero sin embargo yo tengo mis propias mañas especiales en este tipo de juego, no por nada llevo estas barajas en mis bolsillos, aunque no juegue o invite a jugar anadie y suene despectivo o indiferente si alguien menciona algo acerca de este tipo de cosas. Hay cosas que solamente sabe cada persona, justo como ahora y aquí.
Fue cuestión de unos pocos segundos cuando al revelar mi primera mano la mostré bastante confiado de mi propia suerte, sobre todo al ver la suya. Al parecer todo indicaba que iba por buen camino yq ue muy pronto Eren estaría luciendo cada vez menos prendas, tal cosa me hacía lucir una mirada especialmente destellante.
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