Al menos me tranquilizaba saber que había descansado bien pese a sus pesadillas, aunque seguía preguntandome de que se tratarían. Al parecer se tomaba en serio del desayuno. La verdad es que lució bastante bonito diciendo aquello y preguntandome si deseaba algo en especial, igualmente al oírle mencionar que su cuerpo estaba perfectamente bien ya adornado de ese grandioso rubor al hacerlo.
- Cambia las sabanas, ya sabes que las prefiero limpias a diario, yo me adelantaré y veré que se puede preparar de desyunar. Si te apresuras puedes echar un vistazo para que vayas aprendiendo. - Me sentía feliz de su disposición al respecto en todas las cosas. Y al llegar a la cocina saqué varios ingredientes para preparar desayuno dulce y salado, aunque esperando por Eren, pues de verdad me gusta su compañía; y mientras le esperaba comencé a medir y a separar las cosas en envases para llevar eso adelantado.
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