La verdad es que me sentí especialmente bien y halagado cuando Eren dijo que la comida está muy buena. Sabía que por su expresión tan transparente estaba siento completamente sincero e incluso me hizo sonreír discretamente. Entonces el comentario que hace de que no se hubiera atrevido de seguro logró evidenciar mi antes discreta sonrisa. Eren en realidad es un chico dulce, sincero y eso em agrada. Y ese "ahora que lo sé..." me hizo dudar si lo decía en broma. Lo cierto era que a medida que iba tratando más a Eren iba también descubriendo cuanto me agrada. Después de todo no fue una simple aventura sin importancia, y esto era debido a estas cosas que me hacen imposible no fijarme en él como algo más que eso o que un simple miembro de nuestro escuadrón.
En algún momento escucho que murmura que lo de anoche le gustó y le miro atentamente mientras tomo un poco del refrescante contenido del jugo que preparó Eren.
- ¿Quieres que se repita algo parecido esta noche? - No era una orden, era una simple pregunta, de modo que muy pronto sabría a que atenerme realmente fuera de acorralarle.
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