Fighting with you until the end

No pensó que éste fuera a decirle nada más, no creía que le contestara nada a aquellas palabras que le dijo, sencillamente había deseado aclara ese asunto, no es que pretendiera nada, en parte le movía un poco de orgullo en el sentido de que no haría ese tipo de cosas sencillamente si se lo ordenaran. Si por ejemplo hubiera sido Erwin, por decir, quien le hubiera pedido esas cosas, en absoluto hubiera podido obedecer, pero fue Levi quien lo hizo, y en ese caso todo fue diferente, y no pudo negarse, y deseó hacer aquellas cosas, bien podía admitir que le gustó como se portó aquella noche, y que por si mismo no habría pasado nada por mucho que hubiera deseado algo, cualquier cosa, y en parte era algo que agradecía. Le daba verguenza, eso sí, todo a lo que había llegado, pero era de admitir que lo deseó mucho, y era algo que necesitaba exteriorizar, por su modo de hablar pareciera que le obligó, cuando no fue de aquella manera, se entregó voluntariamente.

Aunque no esperó que le dijera nada, casi esperaba que ahora si que se hubiera quedado dormido, pero sin embargo oyó claramente como éste le invitaba a acostarse en su cama como si nada, haciéndole tragar saliva nervioso. ¿Por qué le pedía eso ahora? ¿Se daba cuenta de hasta que punto le confundía? Primero le gritaba, luego se disculpaba, y ahora le pedía que se metiera en su cama. Pensó en negarse, tal vez hacerse el dormido por no hacerle caso, estaba aun un poco molesto con lo que había ocurrido antes, habían tenido una acalorada discusión, lo raro es que no le hubiera golpeado... Aunque no se le pasaba por alto el tono con el que se lo había pedido, ni ese por favor. Y casi sin darse cuenta de lo que hacía su propio cuerpo se puso en pie y se acercó a la cama de éste, metiéndose en la cama, bajo las sábanas, con el rostro muy sonrojado, cerrando los ojos y tratando de no tocar el cuerpo de éste, quedándose en el borde de la cama, muy nervioso y sin mediar palabra, pudiendo parecer que quería hacerse el dormido, pero que era imposible porque su rostro presentaba tensión y nervios, encargándose de cubrírselo con la sábana.