- Dices eso, pero en lugar de simplemente dejar de quitartelas sigues perdiendo... - Comenté aparentemente tan tranquilo y calmado como si nada. A cada instante que pasaba Eren iba ganando más nervios. Lo podía notar, pues era extremadamente fácil de leer. Yo en cambio me ocultaba tras mi actitud centrada, confiada e imperturbable ante la situación, con esto esperaba ganar debido a ponerle los nervios al límite y hacerle perder el enfoque.
- ¿Te parece que soy del tipo de persona que se la pasa gastando bromas? - Respondí ante sus sorprendida forma de preguntarme acerca de mis demandas al ganarle sin apartar mi vista de las barajas. Entonces me dice nuevamente que no hará eso, dicienéndolo de tal manera convincente como si en realidad no pensase perder. Pero no pensar perder y realmente no hacerlo eran cosas muy distintas. Ya se vería.
- No está mal... - Dije viendo su mano.
- Pero no tanto como la mía. - Y entonces mostré la mía, todas eran Aces.
- Ahora tendrás que cumplir con lo que te dije, pero antes... Retíra tu ropa interior. Y procura hacerlo tan despecio como puedas. Recuerda que estoy inmóvil, así que luego de que lo hagas, colócate sobre mi y cuando yo te lo indique entonces procedes con mi petición. - Expliqué parte por parte con la voz más firme y serena que poseo. Aunque había dicho aquello había recobrado mi movilidad hacía un rato y había estado pretendiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario